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7033391De una batalla perdidahttps://www.gandhi.com.mx/de-una-batalla-perdida-9788419735560/phttps://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/6593206/9788419735560.jpg?v=638648769049030000https://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/6609605/9788419735560.jpg?v=638655451859900000https://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/6638477/9788419735560.jpg?v=638665917645730000https://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/6780738/9788419735560.jpg?v=638723977292530000https://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/6874350/9788419735560.jpg?v=638751778884770000https://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/6877664/9788419735560.jpg?v=638756993508470000https://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/6922973/9788419735560.jpg?v=638764767049970000https://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/7009088/9788419735560.jpg?v=638785467690130000https://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/7033667/9788419735560.jpg?v=638793840921400000370370MXNNórdica LibrosInStock/Libros/De una batalla perdida es el inolvidable discurso que pronunció Aleksiévich en la entrega del Nobel. Esta edición ilustrada es la mejor manera de descubrir a una de las voces más destacadas de nuestro tiempo. No estoy sola en esta tribuna Me rodean voces, centenares de voces, siempre están conmigo. Desde pequeña. Vivía en un pueblo. A los niños nos gustaba jugar en la calle, pero por las tardes nos atraían, como imanes, los bancos junto a las casas, o jatas, como se dice en nuestra tierra, en las que se reunían las mujeres agotadas. Ninguna de ellas tenía marido, padre o hermanos; no recuerdo que hubiera hombres en el pueblo después de la guerra: durante la Segunda Guerra Mundial, en Bielorrusia, en el frente y en las operaciones de los partisanos, pereció uno de cada cuatro bielorrusos. Nuestro mundo infantil de después de la guerra era un mundo de mujeres.6702902De una batalla perdida370370https://www.gandhi.com.mx/de-una-batalla-perdida-9788419735560/phttps://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/6593206/9788419735560.jpg?v=638648769049030000https://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/6609605/9788419735560.jpg?v=638655451859900000https://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/6638477/9788419735560.jpg?v=638665917645730000https://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/6780738/9788419735560.jpg?v=638723977292530000https://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/6874350/9788419735560.jpg?v=638751778884770000https://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/6877664/9788419735560.jpg?v=638756993508470000https://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/6922973/9788419735560.jpg?v=638764767049970000https://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/7009088/9788419735560.jpg?v=638785467690130000https://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/7033667/9788419735560.jpg?v=638793840921400000InStockMXN10FITapa blanda1a Edición20249788419735560_De una batalla perdida es el inolvidable discurso que pronunció Aleksiévich en la entrega del Nobel. Esta edición ilustrada es la mejor manera de descubrir a una de las voces más destacadas de nuestro tiempo. No estoy sola en esta tribuna Me rodean voces, centenares de voces, siempre están conmigo. Desde pequeña. Vivía en un pueblo. A los niños nos gustaba jugar en la calle, pero por las tardes nos atraían, como imanes, los bancos junto a las casas, o jatas, como se dice en nuestra tierra, en las que se reunían las mujeres agotadas. Ninguna de ellas tenía marido, padre o hermanos; no recuerdo que hubiera hombres en el pueblo después de la guerra: durante la Segunda Guerra Mundial, en Bielorrusia, en el frente y en las operaciones de los partisanos, pereció uno de cada cuatro bielorrusos. Nuestro mundo infantil de después de la guerra era un mundo de mujeres.9788419735560_Nórdica Libros9788419735560_9788419735560158.0000x219.0000x12.0000Svetlana AleksiévichEspañol2024-11-01T00:00:00+00:0048158.0000219.0000256.000012.0000Nórdica Libros