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Frederika Amalia Finkelstein
El olvido
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606309El olvidohttps://www.gandhi.com.mx/el-olvido/phttps://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/1864102/4be1fa24-acf7-4c55-a03f-581d0d6fb7b8.jpg?v=638429267173570000259345MXNEl cuenco de plataInStock/Libros/Literatura y novelas//Libros//Libros/Selecto/<span style="color: rgb(114, 114, 114); font-family: "Cormorant Garamond", serif; font-size: 18px;">“Me llamo Alma y no viví la guerra. Crecí escuchando Daft Punk, bebiendo Coca-Cola y jugando a los videojuegos con la Playstation 2. Un día, supe que mi abuelo huyó de Polonia algunos años antes de la Segunda Guerra Mundial, antes de la Shoah. El costado inconcebible de esta palabra me exasperó durante largo tiempo. Fue un viernes a la tarde, me encontré frente a la nieta de Adolf Eichmann y ella no lograba recordar el nombre del campo de Auschwitz, sentí dolor por ello, duró solo unos segundos. Recordé aquello que decía Primo Levi en Si esto es un hombre: “No olvides que esto sucedió, no, no lo olvides”; creo que quiero hacer exactamente lo contrario. Olvidar todo.”</span>603925El olvido259345https://www.gandhi.com.mx/el-olvido/phttps://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/1864102/4be1fa24-acf7-4c55-a03f-581d0d6fb7b8.jpg?v=638429267173570000InStockMXN1FITapa blanda1a Edición20159789873743375_<span style="color: rgb(114, 114, 114); font-family: "Cormorant Garamond", serif; font-size: 18px;">“Me llamo Alma y no viví la guerra. Crecí escuchando Daft Punk, bebiendo Coca-Cola y jugando a los videojuegos con la Playstation 2. Un día, supe que mi abuelo huyó de Polonia algunos años antes de la Segunda Guerra Mundial, antes de la Shoah. El costado inconcebible de esta palabra me exasperó durante largo tiempo. Fue un viernes a la tarde, me encontré frente a la nieta de Adolf Eichmann y ella no lograba recordar el nombre del campo de Auschwitz, sentí dolor por ello, duró solo unos segundos. Recordé aquello que decía Primo Levi en Si esto es un hombre: “No olvides que esto sucedió, no, no lo olvides”; creo que quiero hacer exactamente lo contrario. Olvidar todo.”</span>9789873743375_El cuenco de plata9789873743375_9789873743375Frederika Amalia FinkelsteinEspañolArgentina144El cuenco de plata