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229942Joelhttps://www.gandhi.com.mx/joel-6/phttps://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/1511728/142ae060-7db7-49dd-bcee-4f1469bff548.jpg?v=6383382615314000005858MXNLIBROTEKAInStock/Audiolibros/<p>Palabra de Jehová que vino a Joel, hijo de Petuel.</p><p>Oíd esto, ancianos, y escuchad, todos los moradores de la tierra. ¿Ha acontecido esto en vuestros días, o en los días de vuestros padres?</p><p>De esto contaréis a vuestros hijos, y vuestros hijos a sus hijos, y sus hijos a la otra generación.</p><p>Lo que quedó de la oruga comió el saltón, y lo que quedó del saltón comió el revoltón; y la langosta comió lo que del revoltón había quedado.</p><p>Despertad, borrachos, y llorad; gemid, todos los que bebéis vino, a causa del mosto, porque os es quitado de vuestra boca.</p><p>Porque pueblo fuerte e innumerable subió a mi tierra; sus dientes son dientes de león, y sus muelas, muelas de león.</p><p>Asoló mi vid, y descortezó mi higuera; del todo la desnudó y derribó; sus ramas quedaron blancas.</p><p>Llora tú como joven vestida de cilicio por el marido de su juventud.</p><p>Desapareció de la casa de Jehová la ofrenda y la libación; los sacerdotes ministros de Jehová están de duelo.</p><p>El campo está asolado, se enlutó la tierra; porque el trigo fue destruido, se secó el mosto, se perdió el aceite.</p><p>Confundíos, labradores; gemid, viñeros, por el trigo y la cebada, porque se perdió la mies del campo.</p><p>La vid está seca, y pereció la higuera; el granado también, la palmera y el manzano; todos los árboles del campo se secaron, por lo cual se extinguió el gozo de los hijos de los hombres.</p><p>Ceñíos y lamentad, sacerdotes; gemid, ministros del altar; venid, dormid en cilicio, ministros de mi Dios; porque quitada es de la casa de vuestro Dios la ofrenda y la libación.</p><p>Proclamad ayuno, convocad a asamblea; congregad a los ancianos y a todos los moradores de la tierra en la casa de Jehová vuestro Dios, y clamad a Jehová.</p><p>¡Ay del día! porque cercano está el día de Jehová, y vendrá como destrucción por el Todopoderoso.</p>...229514Joel5858https://www.gandhi.com.mx/joel-6/phttps://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/1511728/142ae060-7db7-49dd-bcee-4f1469bff548.jpg?v=638338261531400000InStockMXN99999DIAudiolibro20219781667085203_W3siaWQiOiIyMDZiNDU3Mi1lMmU5LTQzODktOGExOC0xZDk5NmE0OGEwNGUiLCJsaXN0UHJpY2UiOjYwLCJkaXNjb3VudCI6MCwic2VsbGluZ1ByaWNlIjo2MCwiaW5jbHVkZXNUYXgiOnRydWUsInByaWNlVHlwZSI6Ildob2xlc2FsZSIsImN1cnJlbmN5IjoiTVhOIiwiZnJvbSI6IjIwMjUtMDMtMjBUMDU6MDA6MDBaIiwidG8iOiIyMDI1LTAzLTMxVDIzOjU5OjU5WiIsInJlZ2lvbiI6Ik1YIiwiaXNQcmVvcmRlciI6ZmFsc2UsImlzRWxpZ2libGVGb3JDcmVkaXRUcmlhbCI6dHJ1ZSwiY3JlZGl0UHVyY2hhc2VQcmljZSI6MX0seyJpZCI6IjhlNjJkNjc4LWMwNGQtNGRiOS1hODNiLTcyZTVmMDc5MTE2OSIsImxpc3RQcmljZSI6NjEsImRpc2NvdW50IjowLCJzZWxsaW5nUHJpY2UiOjYxLCJpbmNsdWRlc1RheCI6dHJ1ZSwicHJpY2VUeXBlIjoiV2hvbGVzYWxlIiwiY3VycmVuY3kiOiJNWE4iLCJmcm9tIjoiMjAyNS0wNC0wMVQwMDowMDowMFoiLCJyZWdpb24iOiJNWCIsImlzUHJlb3JkZXIiOmZhbHNlLCJpc0VsaWdpYmxlRm9yQ3JlZGl0VHJpYWwiOnRydWUsImNyZWRpdFB1cmNoYXNlUHJpY2UiOjF9XQ==9781667085203_<p>Palabra de Jehová que vino a Joel, hijo de Petuel.</p><p>Oíd esto, ancianos, y escuchad, todos los moradores de la tierra. ¿Ha acontecido esto en vuestros días, o en los días de vuestros padres?</p><p>De esto contaréis a vuestros hijos, y vuestros hijos a sus hijos, y sus hijos a la otra generación.</p><p>Lo que quedó de la oruga comió el saltón, y lo que quedó del saltón comió el revoltón; y la langosta comió lo que del revoltón había quedado.</p><p>Despertad, borrachos, y llorad; gemid, todos los que bebéis vino, a causa del mosto, porque os es quitado de vuestra boca.</p><p>Porque pueblo fuerte e innumerable subió a mi tierra; sus dientes son dientes de león, y sus muelas, muelas de león.</p><p>Asoló mi vid, y descortezó mi higuera; del todo la desnudó y derribó; sus ramas quedaron blancas.</p><p>Llora tú como joven vestida de cilicio por el marido de su juventud.</p><p>Desapareció de la casa de Jehová la ofrenda y la libación; los sacerdotes ministros de Jehová están de duelo.</p><p>El campo está asolado, se enlutó la tierra; porque el trigo fue destruido, se secó el mosto, se perdió el aceite.</p><p>Confundíos, labradores; gemid, viñeros, por el trigo y la cebada, porque se perdió la mies del campo.</p><p>La vid está seca, y pereció la higuera; el granado también, la palmera y el manzano; todos los árboles del campo se secaron, por lo cual se extinguió el gozo de los hijos de los hombres.</p><p>Ceñíos y lamentad, sacerdotes; gemid, ministros del altar; venid, dormid en cilicio, ministros de mi Dios; porque quitada es de la casa de vuestro Dios la ofrenda y la libación.</p><p>Proclamad ayuno, convocad a asamblea; congregad a los ancianos y a todos los moradores de la tierra en la casa de Jehová vuestro Dios, y clamad a Jehová.</p><p>¡Ay del día! porque cercano está el día de Jehová, y vendrá como destrucción por el Todopoderoso.</p>(*_*)9781667085203_<p>Palabra de Jehová que vino a Joel, hijo de Petuel.</p><p>Oíd esto, ancianos, y escuchad, todos los moradores de la tierra. ¿Ha acontecido esto en vuestros días, o en los días de vuestros padres?</p><p>De esto contaréis a vuestros hijos, y vuestros hijos a sus hijos, y sus hijos a la otra generación.</p><p>Lo que quedó de la oruga comió el saltón, y lo que quedó del saltón comió el revoltón; y la langosta comió lo que del revoltón había quedado.</p><p>Despertad, borrachos, y llorad; gemid, todos los que bebéis vino, a causa del mosto, porque os es quitado de vuestra boca.</p><p>Porque pueblo fuerte e innumerable subió a mi tierra; sus dientes son dientes de león, y sus muelas, muelas de león.</p><p>Asoló mi vid, y descortezó mi higuera; del todo la desnudó y derribó; sus ramas quedaron blancas.</p><p>Llora tú como joven vestida de cilicio por el marido de su juventud.</p><p>Desapareció de la casa de Jehová la ofrenda y la libación; los sacerdotes ministros de Jehová están de duelo.</p><p>El campo está asolado, se enlutó la tierra; porque el trigo fue destruido, se secó el mosto, se perdió el aceite.</p><p>Confundíos, labradores; gemid, viñeros, por el trigo y la cebada, porque se perdió la mies del campo.</p><p>La vid está seca, y pereció la higuera; el granado también, la palmera y el manzano; todos los árboles del campo se secaron, por lo cual se extinguió el gozo de los hijos de los hombres.</p><p>Ceñíos y lamentad, sacerdotes; gemid, ministros del altar; venid, dormid en cilicio, ministros de mi Dios; porque quitada es de la casa de vuestro Dios la ofrenda y la libación.</p><p>Proclamad ayuno, convocad a asamblea; congregad a los ancianos y a todos los moradores de la tierra en la casa de Jehová vuestro Dios, y clamad a Jehová.</p><p>¡Ay del día! 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