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4315824La gringa del pastorhttps://www.gandhi.com.mx/la-gringa-del-pastor-9786078636716/phttps://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/3999498/49b4c09f041cc3d9ec8ad3ede385b7f6ca6e4425_9786078636716.jpg?v=638430249215600000MXNBonilla Artigas editoresOutOfStock/Libros/La vida es un desastre para Calvo. Ni cómo negarlo. Su chamba, el despacho de abogados, Calvo-Abogados, está a días de desaparecer, de que cierre el changarro, y él de no tener de otra más que escurrirse a ser otro traje con corbata, otro ladrillo en la pared. Detesta imaginar el regresar a uno de esos despachos corporativos -de donde se escabulló, cola entre las patas, cinco años atrás- a arrumbarse dentro de un cubículo sin ventana, pantalla con estática, escritorio de utilería, silla ergonómica diseñada para el quiropráctico.Un cuerpo aparece flotando en el arremedo de río que corre entre los Viveros de Coyoacán, hallado por un corredor dominguero que no deja de vomitar y un poli con más ganas de regresar a su torta de chorizo a medio comer, que de hacerla de Guardian de la Bahía.Una viuda, gringa ella, de quien Calvo no se acuerda, y quién esconde su tristeza detrás de un vestido, unos tacones y un perfume que solo sirven para calentar la imaginación, contrata a un investigador que no encuentra.Un pastor, gringo él, tropicalizado hasta aullar ¡mi virgen morena!; una casa que encierra cucarachas; un viejo abogado que espera la muerte de su esposa enferma como quien espera el sello de la ventanilla 4 de la Dirección General de Pase Usted a la Siguiente Vida, solo para escuchar, uyy no, joven, esas son en la ventanilla 7.En su intento por regresar a la vida, Calvo se arrastra sin fijarse en toda la mierda que pisa, en la que se le queda pegada.4252104La gringa del pastor315350https://www.gandhi.com.mx/la-gringa-del-pastor-9786078636716/phttps://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/3999498/49b4c09f041cc3d9ec8ad3ede385b7f6ca6e4425_9786078636716.jpg?v=638430249215600000OutOfStockMXN0FITapa blanda1a Edición20209786078636761_W3siaWQiOiI0ZDU4MjJkYy1lNWIyLTRmOTMtOWNjNy0xOWU5OTk3ZTcwMmIiLCJsaXN0UHJpY2UiOjM0OSwiZGlzY291bnQiOjAsInNlbGxpbmdQcmljZSI6MzQ5LCJpbmNsdWRlc1RheCI6dHJ1ZSwicHJpY2VUeXBlIjoiV2hvbGVzYWxlIiwiY3VycmVuY3kiOiJNWE4iLCJmcm9tIjoiMjAyNC0wNC0xM1QxNDowMDowMFoiLCJyZWdpb24iOiJNWCIsImlzUHJlb3JkZXIiOmZhbHNlfV0=9788433932761_<p><strong>Un puñetazo minimalista que radiografía sin moralina el no future de la generación post-11S de 2001. El hijo bastardo de Brett Easton Ellis y Douglas Coupland en noventa y siete polaroids y un epílogo que son como una glacial esquela mortuoria sobre los logros de la sociedad de la opulencia (Juan Cervera, Rock de Lux)</strong></p><p>White Mike no fuma, no bebe, no se droga, lee a Camus y a Nietzsche, y ha terminado el instituto. Era un buen estudiante, pero ahora lleva seis meses sin hacer nada. Entretanto, se ha convertido en un camello sumamente eficaz y está ganando una pequeña fortuna. Allí estarán los jovencísimos Mark Rothko y Timmy, que aspiran a ser gángsters. Y la muy guapa Sara Ludlow, la chica más popular de su universidad, ocupada en organizar fiestas para ser famosa. Y su amiga Jessica, menos guapa que Sara y bastante más torturada, adicta al Twelve, la nueva droga de diseño. Y Claude, que ha sustituido la adicción a la cocaína por la afición a las armas, que almacena en su dormitorio... Cada tantos años, aparece un autor muy joven, casi adolescente, que da cuenta de la entrada a la vida de su generación. Sucedió hace unos años con Menos que cero, de Bret Easton Ellis, y sucede ahora con Twelve, de Nick McDonell.</p>...(*_*)9786078636761_<p>La vida es un desastre para Calvo. Ni cómo negarlo. Su chamba, el despacho de abogados, Calvo-Abogados, está a días de desaparecer, de que cierre el changarro, y él de no tener de otra más que escurrirse a ser, otro traje con corbata, otro ladrillo en la pared. Detesta imaginar el regresar a uno de esos despachos corporativos ?de donde se escabulló, cola entre las patas, cinco años atrás? a arrumbarse dentro de un cubículo sin ventana, pantalla con estática, escritorio de utilería, silla ergonómica diseñada para el quiropráctico.</p><p>Un cuerpo aparece flotando en el arremedo de rio que corre por entre los Viveros de Coyoacán, hallado por un corredor dominguero que no deja de vomitar y un poli con más ganas de regresar a su torta de chorizo a medio comer, que de hacerla de Guardian de la Bahía.</p><p>Una viuda, gringa ella, de quien Calvo no se acuerda, y quién esconde su tristeza detrás de un vestido, unos tacones y un perfume que solo sirven para calentar la imaginación, contrata a un investigador que no encuentra.</p><p>Un pastor, gringo él, tropicalizado hasta aullar ¡mi virgen morena!; una casa que encierra cucarachas; un viejo abogado que espera la muerte de su esposa enferma como quien espera el sello de la ventanilla 4 de la Dirección General de Pase Usted a la Siguiente Vida, solo para escuchar, uyy no, joven, esas son en la ventanilla 7.</p><p>Intentando regresar a la vida, Calvo se arrastra sin fijarse en toda la mierda que pisa, en la que se le queda pegada.</p>(*_*)9786078636716_La vida es un desastre para Calvo. Ni cómo negarlo. Su chamba, el despacho de abogados, Calvo-Abogados, está a días de desaparecer, de que cierre el changarro, y él de no tener de otra más que escurrirse a ser otro traje con corbata, otro ladrillo en la pared. Detesta imaginar el regresar a uno de esos despachos corporativos -de donde se escabulló, cola entre las patas, cinco años atrás- a arrumbarse dentro de un cubículo sin ventana, pantalla con estática, escritorio de utilería, silla ergonómica diseñada para el quiropráctico.Un cuerpo aparece flotando en el arremedo de río que corre entre los Viveros de Coyoacán, hallado por un corredor dominguero que no deja de vomitar y un poli con más ganas de regresar a su torta de chorizo a medio comer, que de hacerla de Guardian de la Bahía.Una viuda, gringa ella, de quien Calvo no se acuerda, y quién esconde su tristeza detrás de un vestido, unos tacones y un perfume que solo sirven para calentar la imaginación, contrata a un investigador que no encuentra.Un pastor, gringo él, tropicalizado hasta aullar ¡mi virgen morena!; una casa que encierra cucarachas; un viejo abogado que espera la muerte de su esposa enferma como quien espera el sello de la ventanilla 4 de la Dirección General de Pase Usted a la Siguiente Vida, solo para escuchar, uyy no, joven, esas son en la ventanilla 7.En su intento por regresar a la vida, Calvo se arrastra sin fijarse en toda la mierda que pisa, en la que se le queda pegada.9786078636716_Bonilla Artigas editores(*_*)9786078636761_BONARTlibro_electonico_9786078636761_9786078636761;9786078636716_9786078636716150.0000x230.0000x20.0000Miguel Esteva WurtsEspañol2020-01-01T00:00:00+00:00230150.0000230.0000360.000020.0000Bonilla Artigas editoreshttps://getbook.kobo.com/koboid-prod-public/bookwire_spain2-epub-0054071d-3b79-4c16-90c9-88b7b08692d6.epub