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3305158Madre Árbol, Hijo Semillahttps://www.gandhi.com.mx/madre-arbol-hijo-semilla-9781386943877/phttps://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/2818383/6d2f6823-41ec-4bb3-ac7e-9bfad3b8bb4d.jpg?v=6383844934356000002020MXNMonstruito EdicionesInStock/Ebooks/<p>Raíz Torcida regresa a su planeta después de quinientos años extraviado en el brazo más lejano de la galaxia. Su mundo está devastado, pero no todo está perdido.</p><p>--</p><p>Hay algo allá abajo, entre las ramas deshojadas de Madre, en los lindes de su bosque, junto a la entrada oriente del valle sagrado. Es lo que queda de ciudades construidas por los carnívoros. No estaban aquí el día que me marché.</p><p>Entre sus muros demolidos veo piras alimentadas con cuerpos de Pod desmembrados. Un poco más cerca del templo están las máquinas de guerra alineadas.</p><p>Disparan toda su artillería contra la barrera viva de Madre.</p><p>Y Madre resiste.</p><p>Se oyen los gritos desesperados de los carnívoros en las líneas de ataque. Se mezclan con otros gritos de odio y barbarie. Madre mantiene a estos seres a raya. Empuja con sus lianas inferiores y hojas enormes y resistentes como naves estelares. Pero el cerco se ve débil, sin espinas. No tiene la intensidad que solía desincentivar a las criaturas que nos amenazaban en el pasado.</p><p>Del otro lado del cerco y por apenas un instante, veo a un grupo de Pod armados con rocas y lanzas. Son un centenar de sombras altas y de cáscaras gruesas esperando la última guerra que los verá arder.</p><p>--</p>...3240983Madre Árbol, Hijo Semilla2020https://www.gandhi.com.mx/madre-arbol-hijo-semilla-9781386943877/phttps://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/2818383/6d2f6823-41ec-4bb3-ac7e-9bfad3b8bb4d.jpg?v=638384493435600000InStockMXN99999DIEbook20189781386943877_W3siaWQiOiI5OTU2YmY2Mi0yZDYwLTRhZWUtOTRlZS1iYThlZmFhMWZlMDkiLCJsaXN0UHJpY2UiOjE5LCJkaXNjb3VudCI6MCwic2VsbGluZ1ByaWNlIjoxOSwiaW5jbHVkZXNUYXgiOnRydWUsInByaWNlVHlwZSI6IklwcCIsImN1cnJlbmN5IjoiTVhOIiwiZnJvbSI6IjIwMjQtMTEtMThUMDU6MDA6MDBaIiwidG8iOiIyMDI0LTExLTMwVDIzOjU5OjU5WiIsInJlZ2lvbiI6Ik1YIiwiaXNQcmVvcmRlciI6ZmFsc2V9LHsiaWQiOiJjYTUyMTA3NC1mMDFlLTRjNDktOGU2MS0zYjNhMGJiNDgzMTkiLCJsaXN0UHJpY2UiOjIwLCJkaXNjb3VudCI6MCwic2VsbGluZ1ByaWNlIjoyMCwiaW5jbHVkZXNUYXgiOnRydWUsInByaWNlVHlwZSI6IklwcCIsImN1cnJlbmN5IjoiTVhOIiwiZnJvbSI6IjIwMjQtMTItMDFUMDA6MDA6MDBaIiwicmVnaW9uIjoiTVgiLCJpc1ByZW9yZGVyIjpmYWxzZX1d9781386943877_<p>Raíz Torcida regresa a su planeta después de quinientos años extraviado en el brazo más lejano de la galaxia. Su mundo está devastado, pero no todo está perdido.</p><p>--</p><p>Hay algo allá abajo, entre las ramas deshojadas de Madre, en los lindes de su bosque junto a la entrada oriente del valle sagrado. Es lo que queda de ciudades construidas por los carnívoros. No estaban aquí el día que me marché.</p><p>Entre sus muros demolidos veo piras alimentadas con cuerpos de Pod desmembrados. Un poco más cerca del templo están las máquinas de guerra alineadas.</p><p>Disparan toda su artillería contra la barrera viva de Madre.</p><p>Y Madre resiste.</p><p>Se oyen los gritos desesperados de los carnívoros en las líneas de ataque. Se mezclan con otros gritos de odio y barbarie. Madre mantiene a estos seres a raya. Empuja con sus lianas inferiores y hojas enormes y resistentes como naves estelares. Pero el cerco se ve débil, sin espinas. No tiene la intensidad que solía desincentivar a las criaturas que nos amenazaban en el pasado.</p><p>Del otro lado del cerco y por apenas un instante, veo a un grupo de Pod armados con rocas y lanzas. Son un centenar de sombras altas y de cáscaras gruesas esperando la última guerra que los verá arder.</p><p>--</p>(*_*)9781386943877_<p>Raíz Torcida regresa a su planeta después de quinientos años extraviado en el brazo más lejano de la galaxia. Su mundo está devastado, pero no todo está perdido.</p><p>--</p><p>Hay algo allá abajo, entre las ramas deshojadas de Madre, en los lindes de su bosque, junto a la entrada oriente del valle sagrado. Es lo que queda de ciudades construidas por los carnívoros. No estaban aquí el día que me marché.</p><p>Entre sus muros demolidos veo piras alimentadas con cuerpos de Pod desmembrados. Un poco más cerca del templo están las máquinas de guerra alineadas.</p><p>Disparan toda su artillería contra la barrera viva de Madre.</p><p>Y Madre resiste.</p><p>Se oyen los gritos desesperados de los carnívoros en las líneas de ataque. Se mezclan con otros gritos de odio y barbarie. Madre mantiene a estos seres a raya. Empuja con sus lianas inferiores y hojas enormes y resistentes como naves estelares. Pero el cerco se ve débil, sin espinas. No tiene la intensidad que solía desincentivar a las criaturas que nos amenazaban en el pasado.</p><p>Del otro lado del cerco y por apenas un instante, veo a un grupo de Pod armados con rocas y lanzas. Son un centenar de sombras altas y de cáscaras gruesas esperando la última guerra que los verá arder.</p><p>--</p>...9781386943877_Monstruito Edicioneslibro_electonico_ba7905f4-8ec5-34c3-84e8-2a6493f8f038_9781386943877;9781386943877_9781386943877Dan GuajarsEspañolMéxicohttps://getbook.kobo.com/koboid-prod-public/draft2digital_ipp-epub-b289e75c-12fa-4563-a5a6-9f3b21e301fd.epub2018-03-19T00:00:00+00:00Monstruito Ediciones