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395280No es nohttps://www.gandhi.com.mx/no-es-no-2/phttps://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/4068499/9786077481690.jpg?v=638585679667430000https://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/5405280/9786077481690.jpg?v=638588358440670000https://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/6521296/9786077481690.jpg?v=63863177713720000099110MXNPuckInStock/Libros/Jóvenes//Libros/SÍ. No. El diccionario es bastante claro respecto a la definición de estos dos términos. Sí: expresa una respuesta positiva a una interrogante. No: prefijo que expresa negación, lo contrario, el RECHAZO. Eso es lo que traté de que Zackary entendiera aquella noche. Que yo no quería. Hasta grité, ¡NO! Pero para él, mi respuesta no quería decir nada. Y ahora, ya no soy sino la sombra de mí misma. La agresión sexual es el acto criminal menos denunciado ante la policía. ¿Por qué? Porque la vergüenza y el miedo abruman a la víctima. Porque la víctima debe, encima de todo, hacer frente a los prejuicios originados por la cultura de la violación. Aún en nuestros días, este concepto nos dicta que no debemos salir solas por las noches a menos de que busquemos problemas, no debemos usar ropa sexi porque provocamos a los hombres, no debemos besar a alguien a menos de que estemos listas de llegar hasta el final, no decir que no después de haber dicho que sí. En nuestra sociedad, supuestamente evolucionada, el peso de la prueba todavía recae sobre la víctima y no sobre el agresor. Es primordial educar a nuestros jóvenes y hacer que la vergüenza cambie de bando. Más que enseñar a nuestras niñas a no ser violadas, enseñemos a nuestros niños a no violar. ADVERTENCIA: CONTENIDO SEXUAL EXPLÍCITO, LENGUAJE FUERTE Y VIOLENCIA392408No es no99110https://www.gandhi.com.mx/no-es-no-2/phttps://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/4068499/9786077481690.jpg?v=638585679667430000https://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/5405280/9786077481690.jpg?v=638588358440670000https://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/6521296/9786077481690.jpg?v=638631777137200000InStockMXN10FITapa blanda1a Edición20189786077481690_SÍ. No. El diccionario es bastante claro respecto a la definición de estos dos términos. Sí: expresa una respuesta positiva a una interrogante. No: prefijo que expresa negación, lo contrario, el RECHAZO. Eso es lo que traté de que Zackary entendiera aquella noche. Que yo no quería. Hasta grité, ¡NO! Pero para él, mi respuesta no quería decir nada. Y ahora, ya no soy sino la sombra de mí misma. La agresión sexual es el acto criminal menos denunciado ante la policía. ¿Por qué? Porque la vergüenza y el miedo abruman a la víctima. Porque la víctima debe, encima de todo, hacer frente a los prejuicios originados por la cultura de la violación. Aún en nuestros días, este concepto nos dicta que no debemos salir solas por las noches a menos de que busquemos problemas, no debemos usar ropa sexi porque provocamos a los hombres, no debemos besar a alguien a menos de que estemos listas de llegar hasta el final, no decir que no después de haber dicho que sí. En nuestra sociedad, supuestamente evolucionada, el peso de la prueba todavía recae sobre la víctima y no sobre el agresor. Es primordial educar a nuestros jóvenes y hacer que la vergüenza cambie de bando. Más que enseñar a nuestras niñas a no ser violadas, enseñemos a nuestros niños a no violar. ADVERTENCIA: CONTENIDO SEXUAL EXPLÍCITO, LENGUAJE FUERTE Y VIOLENCIA9786077481690_Puck9786077481690_9786077481690140.0000x215.0000x16.0000Dïana BéliceEspañolMéxico2018-11-16T00:00:00+00:00280140.0000215.0000397.000016.0000Puck