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4916105Patagonia Expresshttps://www.gandhi.com.mx/patagonia-express-9788411074070/phttps://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/4469732/image.jpg?v=638494640438000000139139MXNTusquets Editores S.A.InStock/Ebooks/<p><strong>-</strong></p><p>Los muchos miles de lectores de <strong>Luis Sepúlveda</strong> ya conocen su gran pasión: viajar, deambular por el mundo, observar a sus gentes y escuchar sus historias. Pero <strong>Sepúlveda</strong> tiene también otra pasión, podría decirse que en simbiosis con la anterior, que es la de contar él mismo, a su modo, esas historias oídas y otras que, gracias a su desbordante capacidad de fabulación, enriquecen la realidad convirtiéndola en literatura.</p><p>Pues bien, esta vez <strong>Sepúlveda</strong> nos invita a acompañarle, codo con codo, en algunos de sus periplos por las solitarias tierras de <strong>Patagonia</strong> y <strong>Tierra del Fuego</strong>. Así, conocemos a <strong>Ladislao Eznaola</strong>, vagabundo del mar en busca de un nave fantasma, a su hermano <strong>Agustín</strong>, el bardo de Patagonia, a <strong>Jorge Díaz</strong> y <em>La voz de Patagonia</em> de Radio Ventisquero, la ternura de <strong>Panchito</strong> y su delfín, a aviadores enloquecidos que lo transportan todo, desde vino hasta muertos, por encima de la desolada inmensidad del paisaje... El libro se abre y se cierra con dos encuentros extraordinarios del autor con <strong>Bruce Chatwin</strong> y con <strong>Francisco Coloane</strong>, escritor chileno que alimentó la imaginación inquieta del niño <strong>Sepúlveda</strong>.</p><p><strong>Apuntes de viajes</strong>, sí, pero también un aprendizaje de cómo viajar, de cómo conocer el mundo, de cómo mirarlo y quererlo. <strong>Luis Sepúlveda</strong> prolonga en cierto modo la tradición aprendida por él en los libros de su maestro <strong>Coloane</strong> y procura contagiarnos la inmensa felicidad de la verdera aventura. No en vano termina <em><strong>Patagonia Express</strong></em> con las siguientes palabras:</p><p>Nunca más estaría solo. Coloane me había traspasado sus fantasmas, sus personajes, los indios y emigrantes de todas las latitudes que habitan La Patagonia y la Tierra del Fuego, sus marinos y sus vagabundos del mar. Todos ellos van conmigo y me permiten decir en voz alta que vivir es un magnífico ejercicio.</p>...4658553Patagonia Express139139https://www.gandhi.com.mx/patagonia-express-9788411074070/phttps://gandhi.vtexassets.com/arquivos/ids/4469732/image.jpg?v=638494640438000000InStockMXN99999DIEbook20249788411074070_W3siaWQiOiIxMmQyNWRkNC0wNzZmLTQxMzctOTFjNC03MTQxZjRlZjU2NDEiLCJsaXN0UHJpY2UiOjEzOSwiZGlzY291bnQiOjAsInNlbGxpbmdQcmljZSI6MTM5LCJpbmNsdWRlc1RheCI6dHJ1ZSwicHJpY2VUeXBlIjoiQWdlbmN5IiwiY3VycmVuY3kiOiJNWE4iLCJmcm9tIjoiMjAyNC0wNS0wMlQwNDowMDowMFoiLCJyZWdpb24iOiJNWCIsImlzUHJlb3JkZXIiOmZhbHNlfV0=9788411074070_<p><strong>-</strong></p><p>Los muchos miles de lectores de <strong>Luis Sepúlveda</strong> ya conocen su gran pasión: viajar, deambular por el mundo, observar a sus gentes y escuchar sus historias. Pero <strong>Sepúlveda</strong> tiene también otra pasión, podría decirse que en simbiosis con la anterior, que es la de contar él mismo, a su modo, esas historias oídas y otras que, gracias a su desbordante capacidad de fabulación, enriquecen la realidad convirtiéndola en literatura.</p><p>Pues bien, esta vez <strong>Sepúlveda</strong> nos invita a acompañarle, codo con codo, en algunos de sus periplos por las solitarias tierras de <strong>Patagonia</strong> y <strong>Tierra del Fuego</strong>. Así, conocemos a <strong>Ladislao Eznaola</strong>, vagabundo del mar en busca de un nave fantasma, a su hermano <strong>Agustín</strong>, el bardo de Patagonia, a <strong>Jorge Díaz</strong> y <em>La voz de Patagonia</em> de Radio Ventisquero, la ternura de <strong>Panchito</strong> y su delfín, a aviadores enloquecidos que lo transportan todo, desde vino hasta muertos, por encima de la desolada inmensidad del paisaje... El libro se abre y se cierra con dos encuentros extraordinarios del autor con <strong>Bruce Chatwin</strong> y con <strong>Francisco Coloane</strong>, escritor chileno que alimentó la imaginación inquieta del niño <strong>Sepúlveda</strong>.</p><p><strong>Apuntes de viajes</strong>, sí, pero también un aprendizaje de cómo viajar, de cómo conocer el mundo, de cómo mirarlo y quererlo. <strong>Luis Sepúlveda</strong> prolonga en cierto modo la tradición aprendida por él en los libros de su maestro <strong>Coloane</strong> y procura contagiarnos la inmensa felicidad de la verdera aventura. No en vano termina <em><strong>Patagonia Express</strong></em> con las siguientes palabras:</p><p>Nunca más estaría solo. Coloane me había traspasado sus fantasmas, sus personajes, los indios y emigrantes de todas las latitudes que habitan La Patagonia y la Tierra del Fuego, sus marinos y sus vagabundos del mar. Todos ellos van conmigo y me permiten decir en voz alta que vivir es un magnífico ejercicio.</p>...9788411074070_Tusquets Editores S.A.libro_electonico_9788411074070_9788411074070Luis SepúlvedaEspañolMéxico2024-05-02T00:00:00+00:00https://getbook.kobo.com/koboid-prod-public/planeta-epub-0d0579f4-e814-4f2b-9643-541a631dd254.epub2024-05-02T00:00:00+00:00Tusquets Editores S.A.